Reformar una cocina: 5 casos de éxito

Isabel Rodríguez Isabel Rodríguez
Apatamento Portas de Benfica, INNER TREE INNER TREE
Loading admin actions …

Conocer proyectos de antes y después es un paseo más que inspirador. Sobre todo cuando hablamos de la cocina, una de las zonas de la casa más castigadas por su constante uso en muchos casos o su relativa complejidad en cuanto a cambios.

Por eso, en este libro de ideas queremos presentarte 5 transformaciones de cocinas que, a buen seguro, te harán desear un cambio para tu hogar. Porque los pequeños detalles pueden transformar recetas sencillas en platos maravillosos ¿nos acompañas a ver la 'carta'?

1. Antes: caótica y desfasada

Apatamento Portas de Benfica, INNER TREE INNER TREE

Si dijéramos que este es el estado de una cocina tras el paso de un tsunami no iríamos demasiado desencaminados. El caos reina en este espacio en el que nadie encuentra su pareja de baile: muebles que no tiene puertas ni están alineados, una cerámica que no pega con nada… Un cocktail difícil de digerir. 

Además los azulejos han quedado completamente pasados de moda por su estampado, sobre todo al combinarse con trozos de encimera y contrachapado de manera aleatoria. Para tener una cocina bonita hacen falta no solo materiales relativamente actuales, sino mantenerla cuidada, ordenada y limpia cada día.

Después: acabados modernos y espacios despejados

Apatamento Portas de Benfica, INNER TREE INNER TREE

¿Apostarías porque se trata de la misma cocina? Pues sí, así es. La transformación ha sido espectacular y donde antes encontrábamos un caos absoluto ahora reina el orden. El aspecto es el de una cocina mucho más amplia, equilibrada y sobria. 

En este cambio se ha apostado por la madera en tonalidad clara como principal material, así como por un suelo en color gris antracita que parece de microcemento. Las encimeras están completamente limpias y despejadas de elementos que ensucien (en todos los sentidos) la estética de la cocina.

2. Antes: una cocina muy pequeña

La luz natural es la única tabla de salvación de esta cocina diminuta y poco confortable. La ventana es una conexión con el exterior casi milagrosa para no asfixiarnos dentro de este espacio. Materiales obsoletos, acabados oscuros, un suelo de cerámica tradicional, desorden… Aunque lo cierto es que tenía unas grandes posibilidades de reforma, dada su ubicación y su luz natural. 

Adiós a las paredes

Cuando llegamos al límite de nuestra paciencia, explotamos. Eso es, precisamente, lo que ha ocurrido con esta cocina. Los diseñadores encargados de su transformación optaron por tirar abajo las paredes conectando este espacio con el del salón creando un único y mucho más amplio. 

Esa es la mejor solución en muchísimas viviendas: apostar por darle la cocina al salón. Prescindir de tabiques innecesarios hace que dispongamos de más metros cuadrados y con ellos, más posibilidades. El blanco es un color ideal para cocinas por su luminosidad y sensación de amplitud, y aquí ha sabido utilizarse a la perfección. El suelo en tarima de madera en tono medio nos sirve para que los espacios sean uno solo, pero si lo que tú buscas es separar ambientes sin paredes, dos suelos distintos también serán grandes aliados en ese cometido.

3. Antes: una cocina de terror

Si al principio de este libro de ideas veíamos una cocina propia de haber sufrido una catástrofe natural, esta bien podría ser el escenario de una película de terror. Ni un solo rincón se salva del deterioro, desde las paredes a las puertas pasando por los restos que aún se aprecian del mobiliario.

No debemos olvidar que la cocina, así como el baño, son zonas muy delicadas por la humedad, por el uso, por el desgaste. Es importante mantener una limpieza y una higiene diaria para con estas habitaciones, si no queremos encontrarnos con humedades, muebles cuarteados o amarillentos, paredes desconchadas, etc.

Después: sobriedad y elegancia

La modernidad se coló en el diseño de esta cocina que, tras una profunda renovación, ofrece un aspecto de lo más agradable. Con el gris como color protagonista, la elegancia domina en un espacio que nada tiene que ver con el que veíamos arriba. 

En la nueva cocina se han decantado por una distribución en L abierta a la zona de comedor, separada precisamente por su forma, pero también por un suelo de distinto color y material como decíamos antes: de tarima de madera para el comedor a suelo porcelánico para la cocina. El gris es un color ideal para la cocina por su versatilidad y lo bien que resiste la suciedad. En cambio, si elegimos encimeras de madera deberemos tener un cuidado constante para mantenerlas tan preciosas como el primer día.

4. Antes: improvisación

Dicen que las prisas no son buenas consejeras y parece que alguien corrió más de la cuenta a la hora de rematar esta cocina. La improvisación está presente en este diseño que poco tiene que ver con el resultado tras la renovación.

Tenía un gran potencial pero no tenía la distribución correcta, ni una buena iluminación artificial. La madera en un tono tan oscuro sin la iluminación tanto natural como artificial adecuada, hace mucho más pequeños los espacios. La torre de electrodomésticos partiendo por la mitad la encimera, por ejemplo, era una idea nefasta para aprovechar al cien por cien el espacio. 

Después: aprovechamiento del espacio

La sustitución de la madera oscura por una de tonos más claros fue el primer paso de la transformación de esta cocina que, como se observa en la imagen, ofrece un aspecto mucho más ligero.Se ha quitado la torre de electrodomésticos de ahí en medio y se ha introducido una gran encimera acompañada de cajones homogéneos sin tirador y dos muebles suspendidos. 

También la luz se ha mejorado cambiando los focos por halógenos empotrados, así como sustituyendo la vieja cortina por un estor que deja pasar mejor la luz. La sensación de amplitud se ha acrecentado además de introducir un toque de elegancia y distinción.

5. Antes: una cocina de juguete

Como si el benjamín de la casa hubiera sido el responsable de decorar esta cocina, nos encontramos ante un diseño casi infantil. Y es que patrones, formas y colores se combinan sin demasiado coherencia ofreciendo un aspecto, cuanto menos, obsoleto.

Después: una cocina madura

La madurez ha llegado al diseño de esta cocina. Atrás quedan los colores y estampados infantiles, ahora nos encontramos ante un espacio mucho más sobrio. La transformación se ha basado en la elección de elementos de colores calmados pero joviales, una cocina sencilla pero coqueta lista para ofrecer el mejor rendimiento.

La encimera en granito es una apuesta segura, ya que puede ser una de esas para toda la vida. Es un material resistente y fácil de limpiar y mantener, así como muy versátil por sus diferentes tonalidades en sus acabados.

Si además de la cocina, tu baño pide una renovación a gritos, puedes encontrar inspiración en nuestro libro de ideas: 5 baños Antes y Después: ¡reformas increíbles!

¿Necesitas ayuda con tu proyecto?
¡Contáctanos!

Destacados de nuestra revista