Casa obscura y sin estilo: ¡la remodelaron y quedó sensacional!

Joelia Dávila Joelia Dávila
Departamento Quintas del Mar, el interior el interior
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En Tijuana Baja California, podemos encontrar la casa que visitaremos hoy. Ubicada en una ciudad muy fresca, de topografía irregular y con la maravillosa brisa del mar flotando alrededor, esta casa vivió una transformación increíble y pasó de ser obsoleta, sin estilo y aburrida a interesante, atractiva ¡y muy bonita!

Antes de la reforma, la casa era funcional, contaba con un área social compartida entre sala y comedor, y la cocina se conectaba con ellas por medio de una barra desayunadora. La luz entraba por dos grandes ventanas ubicadas en los extremos del espacio, un piso de ladrillo, azulejos de barro y muebles de madera vieja y desgastada decoraban el lugar. Pero no, no lucía bonita ni acogedora, no invitaba a pasar buenos momentos en familia. ¿Quieres conocer el cambio?

Antes: una sala sin chiste

Como decíamos antes, ciertamente el espacio es funcional: una amplia estancia que comparte sala, comedor y al fondo, junto a la puerta principal, se alcanza a ver la cocina, mientras que lateralmente se distribuyen las habitaciones. La iluminación es buena, pero el piso deja mucho qué desear, los revestimientos no tienen ni ton ni son, y los muebles ¡ni se diga!

Después: ¡una sala espaciosa y luminosa!

Definitivamente el cambio ha sido radical, ¿por dónde empezar? Bien, el piso es lo primero que llama nuestra atención, afortunadamente se retiró ese feo piso de baldosas de ladrillo las cuales se ven muy bien en patios exteriores, ¡pero no en interiores! En su lugar se instaló un porcelanato en tenue color crema, que combina perfecto con la blancura del cielo y las paredes. Las luminarias colgantes se sustituyeron por spots colocados a lo largo del cielo, iluminando discreta y elegantemente. Y el mobiliario, ¡qué belleza! Al puro estilo contemporáneo, el mueble multimedia es un moderno organizador en colores blanco y gris con almacenamiento, y combina con la sala de color gris, el tapete platinado, la mesita de centro de madera con espacios grises y la atmósfera luminosa y fresca.

Antes: un comedor sin estilo

De un marcado estilo ochentero, de latón y estampado en colores pastel, el comedor no luce para nada antojable, no se presta para la sobremesa, la luz genera sombras incómodas, la barra desayunadora parece zona de asador más que cocina interior, en fin… ¡un caos!

Después: ¡elegancia y luz!

Cabe destacar que el estilo contemporáneo se respeta en cada zona y rincón de la estancia, así tenemos que el estilo del comedor y los elementos decorativos que lo rodean, mantienen la misma línea de colores, texturas y formas que la sala. La mesa de cristal, las sillas blancas contrastando con las bancas negras de la barra, un organizador de madera oscura deslumbrando junto a una superficie con acabado de concreto aparente, y el brillante piso reflejando la luz, crean un espacio moderno y muy inspirador.

Antes: cocina pasada de moda

La cocina es muy práctica, efectivamente cuenta con lo necesario para funcionar a la perfección, su diseño en U terminando en barra desayunadora mantiene todo en orden, a la mano y fácil de almacenar y encontrar. Sin embargo el azulejo no es precisamente lo que uno espera ver en una cocina, los colores no dan la impresión de pulcritud y delicadeza que una cocina requiere. La madera hace tiempo que dejó sus mejores años y, definitivamente, un cambio era muy necesario.

Después: ¡de lujo y modernidad total!

La cocina ¡no tiene comparación! Totalmente moderna, actual y funcional, la nueva cocina inunda el espacio de luz y estilo. De melamina con apariencia de madera oscura, las alacenas inferiores mantienen todo en orden y a la mano, mientras que las alacenas superiores se dejaron en color blanco lacado, mimetizándose con las paredes y el cielo y así evitando sobrecargar las vistas a la vez que se permite una difusión general de la luz y el aire fresco.

Detalle del baño actual

El sanitario no es menos elegante. La madera se hace presente pero en azulejos de gran tamaño para revestir la ducha. Un organizador de madera oscura contrasta con los colores y la mampara de cristal cierra el cuadro espectacularmente.

Vista general ¡sensacional!

Terminamos nuestra visita con una vista general del área social. Cada detalle, cada rincón, mueble y elemento decorativo se integra en un todo estético y armónico, en una paleta de colores cálida sin dejar de ser moderna, y un ambiente relajado, fresco y muy acogedor.

Si te ha gustado esta casa bajacaliforniana, sigue disfrutando de la arquitectura norteña y visita Una casa fabulosa ¡y llena de sorpresas!

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