La limpieza real comienza con deshacerte de lo que no sirve, de lo que está roto y de lo que no usás. Eso antes que nada. Para que con un ambiente despejado te sea más fácil limpiar, ordenar y organizarte.
En este libro de ideas te contamos las 6 primeras cosas que deben ir al tacho de basura.
¡Renovarse es vivir!
Cada tanto es bueno hacer una revisión de sábanas y toallas para renovarlas y tener una mejor calidad de vida. No es lo mismo dormir sobre sabanas suaves y lisas que sobre unas llenas de pelotitas o raídas. Cuidémosnos y prioricemos nuestro conforte regalándonos sábanas en buen estado. Lo mismo pasa con las toallas: las que están descoloridas o muy usadas pueden pasar a usarse como trapos para la limpieza u otros usos. No hace falta que las tiremos pero si que renovemos las que usamos diariamente.
La esponja para platos está llena de gérmenes invisibles. Y en general se gasta fácilmente con el uso constante. Revisála periódicamente y no esperes a que ya no limpie más para cambiarla. Una esponja es barata y puede renovarse sin problemas.
Descartá esas sartenes u ollas que sólo ocupan lugar pero que nunca usás. No hace falta que los tires pero sí podés regálarselo a alguien que les de un mejor uso que vos. Una cocina eficiente y organizada no necesariamente tiene que estar llena de utensilios y vajilla. Conservá sólo lo que uses diariamente.
Latas, fideos, galletas… a veces compramos alimentos al por mayor y se nos terminan venciendo antes de usar. Revisiá tu alacena y deshacéte de todo lo que hace años que junta polvo.
Otro espacio para reorganizar y aligerar es la biblioteca y ese espacio donde vas acumulando los diarios y revistas. Entre los libros seguro habrá muchos que querrás conservar pero otros ya están viejos y seguro nunca volverás a leerlos. Regalálos o ¡donálos a la biblioteca más cercana! Los diarios y revistas viejas solo juntan tierra y polvo. ¡Afuera!
Zapatos de otras temporadas, remendados, rotos o descocidos… guardá sólo los que te queden más cómodos y los que más uses. No hace falta que tengas una zapatería es tu casa. ¡Regalá o tirá! Renovate y que tu armario esté más liviano.
Para más consejos de orden y limpieza, revisá este otro libro de ideas.