¡Hacé de tu casa un gran espacio abierto a la naturaleza!

Jerónimo Moretti Jerónimo Moretti
Sofás en línea clásica., Interiorista María Victoria Mengual Interiorista María Victoria Mengual Salas / recibidores
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Nuestro hogar puede estar perfecto, nos podemos sentir cómodos y tranquilos en él. Lo mismo puede ocurrir con el exterior de nuestra casa: nos puede servir para tomar un descanso y estar en contacto con la naturaleza. Pero ver el exterior y el interior de una casa como algo separado es un error muy común. O más que un error, una conexión que muchos no vemos y a la que seguramente podemos sacarle gran provecho. 

El contacto con la naturaleza es una necesidad para la mente humana. Al igual que las plantas se marchitan por falta de luz, es esencial que el hogar disponga de un espacio para estar en contacto con el aire y los espacios abiertos. De ahí lo importante de crear una zona tranquila de descanso donde podamos reforzar los lazos que nos unen a ella.

Si lo pensamos con detenimiento, el exterior y el interior son una misma cosa y así deberían ser tratados a la hora de decorar nuestra casa. En el libro de hoy veremos algunos consejos para conectar el interior del hogar con el mundo externo.

Plantas que conectan el exterior con el interior

Se sabe que las plantas y las flores dan vida a todo lo que rodean y sirven para desconectar del trabajo y respirar aire fresco.

Aunque tengamos un balcón pequeño, las plantas de exterior nos dan mucho y piden poco. Además, con las opciones que existen hoy en día se pueden lograr maravillas.

Las plantas de interior brindan los mismos beneficios, aunque debemos ser cuidadosos a la hora de ubicarlas. Recordemos que las plantas consumen oxígeno y no hay que abusar de ellas en las habitaciones, particularmente en los dormitorios. 

Pero lo ideal sería tener plantas que puedan ser tanto de exterior como de exterior, y con ellas conectar nuestro jardín con las plantas que decoran el interior. Es decir, crear un nexo entre las plantas para que la imaginaria línea que divide el afuera del adentro quede un poco más diluida. 

Abrir las ventanas y las puertas

Ventana Corrediza homify Salas / recibidores Aluminio/Cinc

Un consejo sencillo que muchas veces no aplicamos. Si queremos que la frescura de la naturaleza penetre en nuestra casa, lo primero es abrir las ventanas y las puertas, dejar que el aire entre y haga que nuestra cosas sean parte de él. 

Es por eso que la ventilación es tan pero tan importante. Una adecuada ventilación resuelve funciones vitales como la provisión de oxígeno para respirar y el control del calor,  pero también proporciona condiciones de confort afectando a la temperatura del aire, su humedad, y la disolución de olores indeseables.

Una mala ventilación, por el contrario, puede producir una falta de oxígeno que no suele ser severa pero que provoca incomodidad y algunos  daños en la salud de los habitantes de la vivienda. Muchas veces el vapor que se ocasiona por el uso de los baños, la cocina, las estufas o las duchas puede contribuir a estos problemas.

Así que es hora de abrir las ventanas y dejar que el sol entre, porque donde entra el sol también entra la vida.

Que el exterior sea una extensión del interior

La sencillez, la funcionalidad y la comunicación con la naturaleza se pueden lograr con grandes ventanales y ambientes integrados. También se aconseja el uso de sillones pegados a los ventanales para tener la sensación de estar afuera pero estando adentro. Las velas son otra buena idea: se colocan en el patio, cerca de las ventanas, y sin dudas acercan nuestro living a las bondades del exterior.

Como ocurre con las velas y los sillones, la clave es buscar elementos típicos de interior y trasladarlos al exterior. No nos dejemos encasillar y dejemos volar nuestra imaginación.

Muebles de exterior en el interior de nuestra casa

Metamos los muebles del patio a nuestra casa. Esto puede sonar raro, pero queda muy pero muy bien. Por ejemplo, la mesita que tenemos en el patio bien podríamos ponerla bajo techo, lo cual nos dará la sensación de estar afuera. También podemos hacerlo con las sillas o incluso piletas. Hay varios ejemplos de casas que construyen su pileta en parte adentro de la casa y en parte en el exterior.

De todos modos, no hace falta entrar en tantos gastos. Sólo hay que animarse a utilizar los muebles sin tener en cuenta las divisiones preestablecidas.

Crear armonía entre los dos espacios

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La clave del éxito en este tipo de decoración es lograr un estilo armónico y no caer en el caos, que es lo que muchas veces sucede. No se trata sólo de intercambiar muebles o de abrir las ventanas, o de colocar velas y sillones contra ventanales. La decoración del exterior debe estar en sintonía con la decoración del interior.

Si logramos una armonía entre ambos espacios, podría decirse que nuestra aventura llegó a buen puerto. Recordemos que la línea divisoria entre exterior e interior sólo existe en nuestra cabeza, y que los tonos y colores de nuestro hogar pueden tomar su inspiración de la decoración que tenemos en el jardín.

Césped artificial en el interior

Primero fueron los jardines. Después el césped artificial conquistó también terrazas y cambió su aspecto, convirtiéndolos en lugares más acogedores y llenos de frescura. Los balcones tampoco se quedaron atrás. 

Es que el césped artificial no entiende de superficies. Por muy pequeño que sea el espacio, podemos disfrutar de este producto gracias a una instalación y unos cuidados muy sencillos. 

Sin embargo, la última moda es la instalación del césped artificial en nuestro hogar, es decir dentro de casa. De esta forma se aprovecha todo el potencial de este producto para aplicarlo a cualquier rincón.

Es una propuesta arriesgada, pero si encontramos el lugar indicado y lo complementamos con los consejos de decoración que ya dimos, el resultado será sin dudas muy positivo.

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